El comienzo la aventura

Off:
Necesito el clima y el estado de la isla.
On rol:
Hoy era mi segunda día como mayor de edad y el primero como pirata, puesto que el día anterior era mi cumpleaños y era necesario celebrarlo. Aunque este titulo de pirata me lo había auto-impuesto, ya que todavía no lo era oficialmente, pero todo esto me daba igual, para mí la piratería es algo que se lleva en el corazón, y no un título del que presumir. bueno y ahora, ¿ qué debía hacer? en esta isla no podría llegar a ser feliz así que en cuanto pueda la abandonaré.
Me levanté temprano, mi madre ya se había ido a trabajar pero por suerte me había dejado el desayuno envuelto en un trapo. ¡ Vaya! era una manzana, bueno, mejor que nada...
después dije para mis adentros:
- Iré a la plaza mayor, con un poco de suerte algún canalla querrá bulla y podré divertirme un rato. Aunque lo más importante será buscar a algún compañero y fondos para mi viaje.
Y así con esta idea emprendí mi camino hacia la plaza mayor, y también, hacia la aventura.
De camino a la plaza me encontré con un viejo amigo, cuando le conté que tenía pensado convertirme en pirata y que pronto abandonaría la isla él, lo único que hizo fue darme la mano y posteriormente un abrazo, sabía que era probable que no volviéramos a vernos.

al entrar en aquella taberna vieja y mohosa, me acerque lentamente hacia la barra, con toda la tranquilidad del mundo mientras oia gritos y golpes de una mesa de alado mio, al parecer eran tres amigos o nakamas de una tripulacion, empece a enervarme con sus gritos pero no podia hacer nada si les atacaba me matarian, coji mi cerveza con la mano izquierda y la levante con toda tranquilidad a la boca, su espuma increible mojaba mis labios, era una sensacion casi orgasmica, algo increible.

la taberna era algo pequeña, sucia y con unos cuadros extraños, la pared era verda y abajo con madera de la mala.... el suelo era con tablones levantados que chirrian al pisarlo y con unos cuantos clavos saliendo.en varias ocasiones ya me habia tropezado un par de veces con alguno mientras iba al baño, los cabrones esos se rieron de mi ya no podia aguantar mas, estaba apunto de saltar con mi pistola y matarlos a todos pero.. era casi imposible ...

Yo caminaba y caminaba sin prisa pero también sin pausa hacia la plaza central mientras disfrutaba del placentero viaje que estaba realizando, niños que jugaban alrededor de mi mientras caminaba, madres que los perseguían para que no se metieran en líos, todo era como siempre, como yo recordaba la ciudad y como quería recordarla cuando no este aquí porque quiero quedarme con esta imagen de normalidad y felicidad. Casi sin darme cuenta, abducido por éste hecho que acabo de relatar, llego exitosamente, claro esta ya que no me iba a perder en una ciudad que conozco desde hace 18 años, a la plaza central allí como ya me imaginaba yo antes de emprender mi camino hasta aquí estaba llena de gente, unos sentados tomaban el sol, luego había corros de señores mayores hablando, niños jugando por allí mientras las madres estaban sentadas también hablando, total lo típico en una ciudad.

ASí que me dispuse a otear el horizonte es busca de alguna persona, preferiblemente de mi edad, para poder viajar con ella cuando de repente me encuentro que un chico que parecía tener unos treinta años pero al que conocía de la escuela por lo cual era de mi edad éste me dijo de una manera un poco homosexual pero aun así no se lo tomé en cuenta que se llamaba Eneko, que no lo conocía aunque en realidad si, solamente él no lo sabía y que si estaba listo para ser mi nakama a lo cual yo le contesté con otra sonrisa en la boca como la suya:

     -     Claro, no lo dudes, además estaba buscando alguien con el cual emprender un viaje y creo que tu eres la mejor opción.

No sabía muy bien el porqué era la mejor opción, solamente era el corazón el que me lo decía y yo le haría caso al corazón. Tras esto le dije:

     -     Quizás sería una gran idea ir a la taberna para encontrar alguna persona mas con la cual viajar porque igual ir los dos solos sea bastante arriesgado. ¿Qué te parece?

Asentí con la cabeza para expresar que aceptaba su petición y después me puse en marcha hacia la la taberna.
Por el camino le empecé a contar mi historia y porqué quería ser un pirata.
Unos escasos diez minutos después nuestros pies se encontraban ya enfrente de ese tugurio al que las personas acostumbraban a llamar taberna.
Entré intentando hacer mucho ruido con la puerta para que la gente que se encontraba dentro se percatara de mi presencia, especialmente si había algún joven dispuesto a vivir una aventura. Carraspeé un poco y dije gritando:
- ! Estoy buscando a algien con quien hacerme a la mar, si alguien es lo suficientemente hombre como para hacerse pirata, vivir fuera de la ley y estar en una sociedad completamente anárquica que se levante y..! ! ME INVITE A UNA COPA!

Una vez mi nuevo compañero escuchó mi pregunta, sin dudarlo y absolutamente de forma rotunda dijo que le parecía una buena idea por lo que ambos no pusimos a caminar con destino taberna con las esperanzas de que hubiera alguien interesante con quien aliarnos en ésta aventura además debíamos elegir bien porque esa persona nos acompañaría durante todo nuestra travesía y por la que debíamos matar si llegase a ser preciso.

Durante el camino Eneko comenzó a relatarme su historia la cual la verdad no era muy larga debido claramente a su corta edad aunque aun así nos llevó un rato así que cuando termino como todavía no habíamos llegado, decidí relatarle yo la mía, total era mi nuevo compañero y debíamos saber todo el uno del otro para llegar al éxito.

Acabé justo cuando llegamos a la puerta de la taberna donde Eneko decidió entrar haciendo ruido con las puertas para llamar la atención de los presentes en la taberna y donde tras unas palabras en las cuales daba constancia de que buscábamos un nuevo compañero para nuestro viaje, uno de ellos aceptó la propuesta de Eneko la cual consistía en que el que quisiera unirse nos invitara a una copa y un chico de pelo rosa que la primera impresión que me dio fue que era un poco retrasado nos invitó mientras sonría cosa que no me dio mucha grima al principio, pero como no hay que juzgar por las primeras apariencias ambos aceptamos la copa que resultó ser una piña colada, bebida que parecía ser muy típica por esta taberna, y la cual probé para ver si sabía bien y la verdad es que no estaba mal. Tras unos minutos bebiendo me terminé mi copa y esperé a que terminaran los que ya son mis nuevos nakamas para ver que hacíamos a partir de ahora.

Al parecer mi entrada triunfal con la intencion de llamar la atecnicon habia tenido resultado y habia conseguido que un tipo extraño y malholiento nos invitara a mi y a mi nuevo compañero a una copa. No estaba muy bueno pero valia para quitar la sed mientras echabamos unos risas.
Una vez nos  habíamos presentado le mire con cara seria y le pregunté:
- ¿ Tu no serás un pederasta verdad? 
Después de escuchar la respuesta le pregunté a cerca de lo que le había pasado hasta la fecha y lo que quería que le pasara en el futuro.
Una vez terminamos toda nuestras conversación me levanté y poniendi como escusa que ya había anochecido me despedí de mis nuevos compañeros y me encaminé hacia el bosque.  Este era el lugar donde yo entrenaba todos los días y aunque hoy hubiera sido un dia muy especial no iba a ser diferente, sobretodo ahora que casi había conseguido dominar el movimiento que llevaba perfeccionando desde hace tiempo.
Así que una vez llegué a aquel páramo lleno de árboles y algun que otro animal comencé a entrenar mi nueva técnica,  a la que llamaría Cassoulette en honor al plaato típico de la región de Toulouse provinvia de Francia. 
Ya llevaba muchos días entrenando así que solo me quedaba precticarla un poco para dominsrla y ser capaz de ejecutarla a la perfección en cualquier situación de peligro, y así lo hice. Estuve durante varias horas tratando de dar lo mejor de mí hasta que finalmente conseguí mi tan ansiada recompensa y al fin pudo presumir de dominar un golpe maestro.
( Este es mi post de entrenamiento.)

Una vez nos tomamos las bebidas y comenzó a oscurecer nos quedamos los tres solos en la taberna y en ese momento Eneko aprovechó para hacerle una pregunta mas que complicada para el nuevo chico que se había unido a nosotros y me llamó la atención la respuesta en la cual dijo "¿Yo un pederasta?, ¿pero que dices? Simplemente soy raro nada mas, según dicen los del pueblo, soy especial, no se si para bien o para mal". Me llamo la atención, ya que parecía ser que no solo yo lo pensaba sino que la gente que ya lo conocía de hace tiempo pensaba lo mismo que yo y claramente era para mal pero tampoco era plan de decírselo al pobre chaval. 


Después de ésto Eneko se fue caminando de la taberna debido a que ya había anochecido y se fue de allí, antes de que dejara la taberna le dije:


     -     Vale, mañana entonces a las 12 quedamos aquí mismo para seguir viendo que hacemos.


Tras eso Eneko dejó la taberna y se fue a lo que el nuevo chico salió detrás de él persiguiéndolo como si fuera un PEDERASTA, no me lo podía creer, quizás nos estuviera mintiendo, no lo sabía pero bueno no importaba confiaba en que Eneko se supiera defender por si solo si fuera necesario así que yo también decidí retirarme de la taberna y volver.


De camino se me ocurrió que si era de noche pero todavía era pronto y con éstas bebidas no tenía mucha hambre de cenar así que decidí irme a un descampado que había cerca del puerto allí podría practicar mi manejo con la espada para mejorar ya que haber encontrado dos nuevos compañeros me había llenado de ganas y de ilusión para entrenar y mejorar mi nivel de pelea. Caminé hacia la zona, por el camino se notaba, aunque ya era de noche, el calor que todavía hacía por la zona aunque ya empezaba a refrescar un poco mas y por lo tanto la sensación era mas agradable.


Al llegar a la zona desenvainé mi espada la cual una vez ya la tenía bien sujeta la agarre con fuerza y me puse a lanzar estocadas y todo tipo de cortes al aires para mejorar mi manera de golpear con la espada, en uno de éstos salte en el aire y conseguí dar varios golpes en el aire antes de tocar el suelo, poco a poco y mientras avanzaba y avanzaba la noche fui mejorando y cada vez era capaz de dar mas golpes.


Después de un largo rato haciendo ese ejercicio me entró el hambre y junto al frío que ya empezaba a hacer decidí dejarlo por hoy y volver a casa que mañana sería de nuevo un día intenso y debía levantarme pronto.


OFF: 3 últimos párrafos son el entrenamiento de la técnica.